¿Quién quiere subirse con nosotros a la máquina del tiempo? Volar por las chimeneas de épocas pasadas y descubrir todas las maravillosas damas que, sin duda, llevaban como ninguna la ropa elegante para mujer más espectacular del momento y ganaban con mucha ventaja el reino de la elegancia.
Empezamos con los años 20…
Recorrer las diferentes estaciones de la moda y hacer parada obligatoria en los felices años 20 es obligatorio. La gente empezaba la década con ganas de pasarlo bien, de quitarse las vergüenzas y los sin sabores bailando para tratar de olvidar la guerra pasada.
¡What a wonderful world! Cantaba Louis Amstrong con su grupo los Hot Fives.
Todo se ponía en marcha; la alegría y la felicidad se convertían en compañeros de viaje y los saraos bastante locos entraban en acción.
Años divertidísimos en los que la coquetería invadía a hombres y mujeres, mientras los sastres exhibían una sonrisa de oreja a oreja mientras no paraban de currar. La gente, muy presumida, se arreglaba en su día a día buscando la ropa más elegante. ¡Well done!
En estos años, solían vestir con prendas hechas a medida, de forma artesanal y la calidad era un must en la vestimenta.
No se fabricaba en serie la ropa y por ello, todos buscaban su costurero de confianza y según el poder adquisitivo de cada uno, la telas eran de unos tejidos u otros.
Los hombres
Los hombres solían vestir con traje, corbata, sombrero – qué guapos – y con abrigos impecables que les concedían un aire de dandi inglés o de príncipe italiano.
Las mujeres
La mujer con traje o falda de día se enamoraba de los vestidos con tirantes, de las lentejuelas y de los flecos cuando salía la luna. Nos encontramos en plena época de los nuevos bailes: el Charleston causa furor. Los bailarines se movían frenéticamente, girando los pies, extendiendo piernas y agitando brazos. ¡Imposible no lanzarse a la pista, lets dance!
Años 50
Después de la Gran Depresión y la Segunda Guerra Mundial, la industria de la moda empieza a resurgir en los años 50 y empieza a ser más accesible la ropa elegante para mujer.
A partir de estos años, nace el prêt-à-porter, (expresión francesa que significa “listo para llevar”), donde se repetían patrones de modelos y tallas de diferentes calidades y precios dependiendo de la demanda.
También había un prêt-à-porter de mayor calidad que hacían las grandes firmas de la moda como Chanel, Yves Saint Laurent…
Entre las jóvenes se empezaba a llevar ropa cómoda, pantalones capri, jerséis amplios, faldas anchas, pero también podíamos encontrar mujeres que nos recuerdan a esas estrellas inalcanzables exuberantes y con curvas de la meca del cine.
Los vestidos marcaban su silueta y dejaban ver una mujer femenina muy, muy sensual.
Nuestras Favoritas
Audrey Hepburn
Nos encanta recordar a Audrey Hepburn en sus películas donde siempre sale impecable y elegante. Es un icono de la moda y todos la hemos intentado copiar alguna vez. No era una belleza normal pero su forma de andar, de hablar y comportarse la hacía mágica.
Katherine Hepburn
Una belleza digna de mención. Siempre tan divertida y maravillosa en sus películas que uno puede ver infinidad de veces sin cansarse.
Empezó actuar en el teatro y después se lanzó al cine, donde tuvo años de éxito.
Mujer de armas tomar, inteligente, a veces le costaba conectar con el publico y acceder a lo que le marcaba Hollywood para publicitar las películas como entrevistas, autógrafos, fotos… Gran tímida, le molestaba que invadiesen su intimidad.
Pedazo de actriz, imposible olvidar: “Todo te lo puedo dar menos el amor, baby”, frase mítica que repetía junto a Cary Grant en La Fiera de mi niña.
Lauren Bacall
Comenzó como modelo. Tenia una mirada felina que hipnotizó hasta el mismísimo Humphrey Bogart que se casaron cuando ella tenia 20 años y él 45 años, su amor fue más allá de la ficción. Estuvieron casados 12 años hasta que Bogart murió.
Era guapa y estilosa. Su elegancia traspasa la pantalla. Enigmática y profunda, siempre estaba perfecta; su pelo ondulado, la caída de pestañas y ese genio pícaro enamoró al público.
Ingrid Bergman
Siempre le quedará Paris y a nosotros su imagen y maravillosa filmografía. Era Sueca y tenia un aire inocente y tímido.
Nos llama la atención su sonrisa y forma de actuar. Era muy camaleónica y su películas abarcan distintos géneros. Trabajó en el cine, teatro y televisión.
Se casó tres veces y tuvo 4 hijos. Tuvo un éxito muy reconocido teniendo varios premios sobre su espalda.
Jackie Kennedy
Además de ser la primera dama de Estados Unidos, destacó siempre por sus estilismos y la prensa la bombardeaba de fotos.
Sus trajes, pañuelos y sombreros eran siempre comentados por ser elegidos normalmente por diseñadores franceses que hacían la ropa elegante para mujer como nadie y no por norteamericanos que se sentían ofendidos por ello.
Fue un icono de la moda en todo el mundo. Tras el asesinato de Kennedy, se casó con Aristóteles Onassis y la prensa del corazón siguió su día a día.
Grace Kelly
Admirada por muchos y odiada por otros, fue un símbolo de elegancia en el cine de Hollywood y más tarde, en la corte Europea.
Llevó todo el glamour a Mónaco y consiguió captar todas las miradas del mundo, aumentar el numero de turistas y con ello recuperó la economía del principado.
Su elegancia sigue viva en sus descendientes que han heredado su espíritu a lo largo de los años. Cómo lo pasé de bien el otro día viendo de nuevo: La ventana indiscreta.
“Viste de forma vulgar y recordarán el vestido, Viste de forma elegante y recordarán a la mujer”
Qué gran verdad de Coco Chanel. Ropa elegante, todos a por ella.