AGAIN renace en Madrid cada temporada. Y lo hace en Madrid por ser la ciudad canalla y sentimental, con esos cielos adorados por pintores y poetas, el lugar donde la tertulia se confunde con el aperitivo y los negocios se tiñen, al son de la carcajada, con los lujos que hacen más amable la vida.
AGAIN nació en Madrid porque es ciudad de cuento y encanto. Tal vez porque es Villa y Corte despliega llaneza y señorío. Y una simpatía arrolladora que se gana a todo el mundo. En sus museos, parques, cafés, tiendas, tascas, barrios y bares la conversación fluye naturalmente – los gatos son curiosos—con cierta chispa humorosa que colorea la vida.
Cierto que hay tribus, pero como Madrid es capital de tolerancia y mestizaje, se habla, se bebe , se compra y se baila con todo tipo de especímenes sin necesitar una carta de presentación. Hasta los pastores- en eso AGAIN es cum laude- si les entra en gana y quieren ir de Madrid al cielo, guían a sus rebaños por el Paseo de la Castellana.
Refugiarse con un chal de AGAIN Cashmere en el parque del Retiro, apoyarse en uno de sus robles centenarios y dar rienda suelta a la creatividad y a los sueños. Me pregunto cuántos poemas, cuántas obras y cuántos diseños se han creado en el parque madrileño. Sin duda, es uno de los lugares mágicos por excelencia de AGAIN, para dibujar y diseñar patrones. Ayer mismo, caminaba descalza por la hierba mientras trataba de encontrar la creatividad. ¡Y Bingo! Estaba justo ahí, en mitad de la nada y el todo.
Si alguien nos pregunta por qué elegimos Madrid, la respuesta es fácil. Ciudad solidaria, extiende unas alas enormes, nos abraza para que nadie se sienta extranjero. Ciudad viva, de corazón inmenso, cuyo latido provoca que todos encontremos un hogar en ella.
Madrid y AGAIN se mueven al son de la alegría y la belleza. Capital hedonista, provoca el despertar de los sentidos mientras parece preguntar: ¿Quieres bailar conmigo?
¡Con AGAIN siempre sale el sol!
Lucía Montojo